domingo, 22 de noviembre de 2015

Incomprendidos club social.

Hay muchas situaciones que tenemos en común todos los que estáis opositando y los que hemos pasado por ello, excusas para explotar delante de la gente, que se quedan en arrebatos mentales mientras respondemos educadamente, siempre muy educadamente.

Hay que partir de la base de que la gente no nos entiende, si asumimos eso, el resto de nuestra vida será más sencilla.

Recuerdo un día que quedé con un par de amigos de la facultad a tomar una cerveza. Ellos estaban hablando de asuntos que les habían entrado en el despacho, de sus horarios, de los jefes... mientras yo disfrutaba de cada segundo de estar ahí, de los ruidos del bar, de la gente que entraba y salía, de estar un viernes tomando algo.

- Últimamente cuando llego a casa estoy agotado, no tengo fuerzas para nada- dijo él. Acto seguido pegó un largo trago de cerveza, como si le diera un efecto de penas nadando en lingotazo de whisky sobre la barra de un bar.

- Ya, a mi me pasa lo mismo, no saco tiempo ni para ir al gimnasio, ni para ver a nadie entre semana-dijo ella mirando al infinito.

-Sí, yo termino al final del dia muerta, pero tengo que sacar tiempo para hacer algo de deporte porque si no me duele muchísimo la espalda- añadí yo, reivindicando mi derecho a estar tomando esa caña.

- Bueno, no es lo mismo, ya sabrás lo que es terminar agotada cuando trabajes- dijo mi amigo, mirándola a ella, esperando el gesto de aprobación de quien sabe de lo que está hablando.

Me empezaron a temblar las piernas y el lado derecho de la cara. Noté como  me ponía roja, el mal estaba recorriendo mis venas. Y comenzó mi monólogo interno, el arrebato de dignidad:
" ¡¿Ya sabré lo que es terminar cansada cuando trabaje?, ¿cuando trabaje, mamón? empiezo a estudiar a las 7 de la mañana, y mientras tú lees el periódico en el ordenador que enciendes a las 9, yo estoy cantando temas como una posesa, y para tí hablar con alguien es seguir trabajando, y para mí , eso es perder un tiempo que luego tengo que recuperar. Luego te tomarás el café, porque tienes derecho a tomarte tu café, y yo me lo haré mientras sigo mirando el código civil, y probablemente mientras me lo tome esté planeando el siguiente tema a estudiar. Y tú, desgraciado, tienes hora de entrada y de salida, fines de semana y puentes, y si no lo tienes es  porque te lo pagan muy bien, y yo ni uno, ni lo otro ni lo de más allá.Y YA ME GUSTARÍA A MÍ TENER QUE VESTIRME POR LAS MAÑANAS"


- ¿Otra?


" ¿Y qué te crees que me paso el día haciendo en casa? Si, tengo una suerte loca de pasarme todo el día entre cuatro paredes, rodeada de temas, de códigos, con un cronómetro machacando  a todas horas?


- ¿Otra?


"Y lo de ponerme enferma sí que es buena, tú puedes llamar y decir que estás malo, que hoy no irás a trabajar, y para mí tener que pasarme unas horas en la cama para recuperarme es el fin del planning de la semana. Mientras la fiebre me hace delirar, con temas, por supuesto, tengo que ver en qué momento voy a meter esos temas que el malestar no me deja estudiar. Y ni hablemos de que todo este " no trabajo" lo hago por el módico precio de cero euros al mes, CERO!"

- Oye, que si quieres otra. Estás empanada, tía- dijo mi amigo desde la barra.

- Sí, ponme tres- añadí.


10 comentarios:

  1. Jajajajaja ayyy q genial eres!! Jajajajaja Yo esos diálogos internos los suelto a la cara, así me va... Jajajaja

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    1. jajaja. Pues que suerte, yo me los guardaba y así me entraban esos tembleques y cabreos...

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  2. jajajjajajaja me ha encantado!! dios esq la gente es lo peor...yo tampoco tengo coj...a contestar pero muchos deberían ser un poco más empaticos q no cuesta tanto. Un abrazo

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    1. Imagino que todos hemos tenido varias situaciones de estas, y como te veas sin nadie que oposite en tu entorno como además contestes te toman por loca porque nadie entiende de lo que hablas.

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  3. Más razón que un santo. A veces piensas ¿como le hago entender a esta gente lo que hago? Otras veces, lo dejas pasar, "oye que si q estoy todo el día en casa super agusto"... y oyes quejarse a tus amigos o simplemente a personas que conoces por ratos, por cosas que tu desearías poder hacer o poder quejarte.
    Eres genial expresando todas esos momentos por los que pasamos los opositores! Un beso

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    1. Sí, es complicado y a mí lo que me pasaba es que me daba pereza perder el poco tiempo que tenía en el exterior discutiendo con alguien. Siempre pensaba...ya llegará mi momento... Si bien no ha llegado, pero bueno...jajaja
      Creo que muchas veces estamos tan de vuelta de todo, que incluso comentarios que van a hacer daño, te entran por un oído y te salen por el otro.
      Estamos hechos a prueba de imbecilidades.

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  4. Que bien contado. Yo también me muerdo la lengua. A veces intento razonarles mi situación porque yo he llegado a la oposición después de casi diez años de trabajar (primero en un despacho como abogada y después en una empresa en el departamento de RRHH), pero es muy difícil. Incluso es difícil hacerlo con otros opositores, porque no todas las opos exigen la misma dedicación y esfuerzo, y a veces se compara sin saber.
    Lo q si he tenido ganas en estos casi dos años y medio de encierro opositoril, es de llamar a mis compañeros de facultad q opositaron al acabar la carrera y disculparme si, en algún momento enfundada en mi traje de abogada tomando cañas, fui una de esas q no empatizó lo suficiente.
    No hay nada como verse en la situación para saber cómo se pasa.

    Un beso!!

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    1. Me ha encantado tu reflexión, eso de que te han entrado ganas de llamar a todos aquellos opositores a los que hayas podido ofender cuando tú estabas ajena a este mundo. Que maja!

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  5. GRANDE ENTRADA!! Añadiría a todo eso la losa que supone la presión del día a día. Esa sensación de estrés tan fuerte que no te la quitas nunca. Para mi es lo más duro. En mi caso la describiría como si hubiera cometido algún delito... sensación de "acojone" y arrepentimiento..... jajajaja..... perdónn

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    1. jajajaj, es que es tal cual. Lo has dicho muy bien. Ya puedes estar haciendo algo que te gusta, disfrutando del día libre, que en el fondo sabes que hay algo que te está estrangulando, esa sensación que dices tú de acojone.
      Pero llegará el día en el que esa sensación desaparezca!!

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